Aunque suene apresurando porque todavía no terminé el viaje , puedo decir que sin duda fue uno de mis destinos favoritos.
Es una ciudad barata, tanto para comer y para tomar; la cerveza está muy barata, unos 10 pesos uruguayos el medio litro si la comprás en un super. Justo caímos un fin de semana que había un festival de la cerveza y que estuvo notable. Nos metimos en una especie de carpa gigante donde encontramos gente de todas las edades, hombres y mujeres, tomando desde temprano en la tarde, subidos a las mesas, cantando canciones en alemán, algunos incluso de traje y corbata, como recién salidos de sus trabajos. Cuando llegamos, a eso de las 8 de la noche, ya estaban todos medios mamados, muy gracioso.
La verdad que un espectáculo muy divertido de observar...no quiero ni saber lo que será la october fest.
Creo que nadie hubiera querido vivir en Alemania durante el siglo XX, o por lo menos durante la mayor parte de él. Sin embargo creo que actualmente, se ha vuelto un lugar súper atractivo, en parte por esa historía trágica y accidentada que ha tenido. Es como mirar la historia de todo el siglo XX pero concentrado dentro de un sólo país: años de expansión y de gloria imperial, dos guerras mundiales, la gran depresión, el nazismo y el holocausto, la guerra fría y la reunificación. Todos estos acontecimientos sacudieron a Alemania, y a su capital en particular.
A mi siempre me gustó la historia, en particular la del siglo XX, y más aún las guerrras mundiales....y si tendrá Alemania para mostrar y enseñar sobre estos temas.
Algo a destacar es que hay muchas cosas gratuitas e interesantes para visitar: sitios sobre el holacausto, la guerra fría, el muro de berlín, el parlamento, las plazas y más.
Esta ciudad dió para más de un tour, y hubieramos hecho más si nos hubiera dado el tiempo. Primero hicimos un tour guiado por la ciudad, el más largo de todos, con énfasis en los principales lugares históricos.
Una de las primeras paradas fue el monumento a los judíos asesinados en europa.Caminar por el monumento al holocausto también fue una experiencia fuerte,más alla de su significado, la sensación de atravesarlo, de vivirlo es intensa y eso que me considero una persona con muy escasa capacidad de apreciar este tipo de cosas. El monumento ocupa casi toda una cuadra, son bloques de cemento de un gris oscuro que a veces dan la sensación de ser lápidas, pero que se van haciendo cada vez más altos a medida que vas atravesando la obra. Sobre todo sentí ahogo y que me hundía. Si bien siempre ves la salida, la obra se vuelve cada vez más un laberinto, donde a cada paso que vas te topás con alguien, que por lo general tiene una cara de desolación parecida a la tuya.
Otra visita obligada fue ver una parte de lo que queda del muro de Berlín, ahora es un pedazo de pared fino, lleno de agujeros por los que podés ver para el otro lado y que se encuentra protegido por una vaya, para que la gente no se siga robando los pedacitos del muro, ya sea para recuerdo o para venderlos luego como souvenir.
Lo más impactante para mi fueron las fotos que hay cerca del muro, que fueron sacadas cuando todavía existía; son realmente gráficas; una ciudad partida al medio, familias divididas, gente muriendo por tratar de cruzar hacia el otro lado, tratando de delimitar por la fuerza y de crear dos mundos cuando en realidad, porque no preguntarse si el hecho mismo de tener que crear una barrera implica que algo esta saliendo mal dentro del plan?
Una de las cosas que más me interesaba entender era cual era el sentimiento de los alemanes ante todo lo que pasó con la guerra en general y el nazismo en particular. Nos explicaban que es un tema sensible todavía en el país y que todavía llevará tiempo superar. Una cosa que me parece super positiva es que parecen haber encontrado el equilibrio entre negación y autoflagelo, es decir, aceptan y piden perdón por lo que pasó, pero sin exagerar y darle demasiada solemnidad a las cosas.
Por ejemplo, del bunker de hitler ahora no queda nada, el lugar está convertido en un estacionamiento en donde sólo hay un cartel que recuerda como fue el lugar con un mapa y explica los últimos días de Hitler y su esposa y como murió.
Está prohibido hacer apología del nazismo, aunque quedan algunos vestigios neonazis que están identificados claramente y que incluso tienen participación política en partidos de ultraderecha. De estos vestigios vimos una muestra en el campo de concentración de Sachsenhausen, nos contaron un grupo intentó prender fuego uno de los barracones reconstruidos alegando que "eso del genocidio" nunca existió.
Al día siguiente hubo que optar entre uno de los tantos tours que había para elegir y fuimos a un campo de concentración,el de Sachsenhausen, que resultó ser sumamente crudo, aunque interesantísimo. El campo, a menos de una hora de Berlín, fue uno de los primeros en instalarse durante la guerra y sirvió muchas veces como un campo para "experimentar" con cosas que se llevarían luego en otros campos a gran escala. Allí se probaron los gases como el ciclón b, que luego se usaría para asesinar a los judíos en masa en los campos de exterminio, o se harían experimentos con vacunas o con cuerpos llevados a la morgue.
Aprendimos la diferencia entre campo de concentración y campo de exterminio, este fue en sus inicios un campo de concentración, para prisioneros políticos y posteriormente sirvió como campo de concentración para judíos y otras minorías perseguidas y finalmente, en los últimos años de la guerra se utilizó como campo de exterminio.
La historia de que se cuenta en la película los "falsificadores" se desarrolló en este campo. Los nazis planeaban falsificar la libra esterlina y así poder inundar Inglaterra con billetes falsos y así hundir la economía. No cuento más por si alguien la quiere ver, esta muy buena la película.
La guía, otra española, para no perder la costumbre, nos contaba que por razones de "salud mental" ellos no hacen ese tour más de dos veces por semana, realmente hay cosas que por más que la cuenten mil veces son difíciles de decir y mucho más de entender.
El campo es más que un museo, todo está reconstruído en los lugares donde se dieron los hechos, los barracones(donde dormían, se lavaban y comían los prisioneros), la enfermería, la morgue, la cocina, el patio, las cámaras de gas, los hornos, . Toda estaba tan siniestramente armado para la tortura física y mental que parece mentira que algo así ocurrió en realidad. Por ejemplo, tenían una sala conocida como el "monstruo verde" donde los oficiales nazis se reunían a comer y a descansar y eran servidos por los prisioneros. Lo ubicaban estrategicamente para que los prisioneros sintieran el olor a comida, comida que jamás iban a probar.
Fomentaban la competencia y la falta de compañerismo entre los propios compañeros, para que no formaran alianzas ni estrategias de supervivencia. Por ejemplo, si algún prisionero perdía su plato o su cubierto se quedaba sin comida, por lo que muchas veces se robaban entre ellos y se generaban problemas internos en la lucha por sobrevivir.
Al final del tour la guía nos trató de explicar como fue que se pudo llegar hasta ese punto de deshumanización bajo la mirada por lo menos cómplice del pueblo alemán. Cerró el tour con una frase- poema de un pastor Alemán que después la busqué porque me pareció bastante sensata:
Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista,
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata,
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista,
Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío,
Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.
La sensación que me dejó lo visto y lo escuchado fue algo así como: nos hacemos cargo de lo que pasó y pedimos perdón, lo mostramos para no volve r a repetirlo nunca más, pero no podemos pasar toda la vida sientiendo culpa, la ciudad tiene mucho más para ofrecer que su historia, hay muchísimos espectáculos de cine, de música, así como festivales y lugares para ir, además de toda la "historia negra" de los libros.